LA FRONTERA
EN LA INVENCIÓN DE UNA VESTIMENTA EN LA CONSTRUCCIÓN IDENTITARIA DE LOS CRIOLLOS
EN EL CHACO TARIJEÑO.
Introducción.
Los
habitantes del Chaco Tarijeño por su evidente situación de pobladores de una
región geográfica de frontera recibieron para la construcción de su identidad
no solo influencia del otro lado de la frontera durante la primera mitad del
siglo XX sino también del interior de la nación Boliviana esto sobre todo en lo
cultural y por ese motivo no se debe caer en la negación de toda vinculación
con la cultura del norte Argentino, porque hacerlo es caer en un error y una
suerte de negación voluntaria de la esencia misma del Chaco como un lugar de
encuentro. En todo caso la construcción identitaria de un segmento poblacional
del Chaco Tarijeño que se reconoce como “Criollo” pasa por la invención de una
vestimenta que lo diferencia y lo identifique como un habitante de la llanura
Chaqueña, sobre todo en su relación con los pueblos del interior de la nación
Boliviana. Es una invención la vestimenta del Criollo en el Chaco Tarijeño, por
ser el resultado del encuentro cultural y haber sufrido evoluciones a partir de
finales de la década del setenta ya que al comprender que la vestimenta o el
estilo corporal definen en realidad quienes somos como resultado de nuestras
decisiones vestimentarias en un espacio territorial o un estadio histórico. Si
intentáramos hacer un rastreo de esta situación encontraríamos que en el caso
especifico del habitante del Chaco Tarijeño no siempre fue así y que la forma
en que creemos hallar la verdad íntima del otro a través de la interpretación de
sus maneras más externas (en este caso su manera de vestir), es una condición
heredada de un tiempo precedente como muchos de los valores que rigen la
actualidad de cualquier sociedad.[1]
Es
importante comprender que desde el siglo XIX en el espacio territorial del
Chaco Tarijeño, conviven por un lado los descendientes de los pueblos indígenas
que fueron asimilados en la nación Chiriguana y en otras identidades
desperdigadas a lo largo de la llanura chaqueña y por el otro lado los
descendientes de los “colonizadores” que después se autodenominaran a lo largo
del siglo XX como “criollos” y que son en su gran mayoría descendientes de
Tarijeños. A este proceso de conformación poblacional diversa se debe agregar
también la presencia de la migración europea que se produce a lo largo del
siglo XX como consecuencia de las situaciones de conflicto y de crisis
económica que afecto al continente europeo.
El espacio
territorial del Chaco Tarijeño con relación a su condición de frontera hasta el
presente fue un espacio donde la movilidad es constante. Si bien es cierto que
la frontera es una categoría de espacio temporal que al establecerse como un
territorio, con un límite opera como sistema de alcance diferencial con
respecto al vecino. Eso en el caso del Chaco Tarijeño es la causal para que su
población que no se define como descendiente de indígena procure apropiarse,
material o simbólicamente, de una identidad y llegado el momento incluso el
inventar una identidad y reinventarla después.
No hay comentarios:
Publicar un comentario